EL ARTE DE VIVIR!!!

En la vida todo es arte, o al menos así lo he sentido siempre. Cada cosa, cada detalle, precisa la mirada de un artista. El simple hecho de movernos requiere de gracia, de una gracia especial. No es igual si caminamos como autómatas, que si nos deslizamos como gacelas. El sencillo acto de sorber un vaso de agua por ejemplo, será muy diferente si lo hacemos sintiendo cómo corre por dentro nuestro, y percibimos la diferencia entre antes de tomarla y después, o contemplamos el cristal de la copa haciéndolo jugar con las luces que nos rodean, todo, absolutamente todo, es arte. En fin, podría seguir Ad Infinitum, pero esta vez sólo quise compartir la idea que tengo. Claro que si profundizamos, vivir es todo un arte!. Aprendí a sanarme y a sanar, eso también es Arte. Existen mil y una vicisitudes y maravillas en la existencia, a través de las cuales debemos aprender a movernos con arte precisamente, tantas, que me asombró encontrar disponible el título.

SEAN TODOS USTEDES MUY BIENVENIDOS!!!

PARA ESTRENAR Y FESTEJAR ESTE AÑO, ESTÁ EN AMAZON, UNO DE MIS ÚLTIMOS LIBROS: "CHISPAS DE LUZ" CONSIDERO QUE RESULTA IDEAL PARA QUIENES VISITAN ESTE BLOG. ¡QUE LO DISFRUTEN Y SAQUEN TODO EL PROVECHO DE ÉL! GRACIAS! QUIEN DESEE COMUNICARSE CONMIGO: luzdecristalazul@gmail.com

ADVERTENCIA

Todos los mensajes aquí expuestos son para el crecimiento espiritual. El discernimiento personal es un requerimiento para leerlos. Si no resuenan con su corazón, deséchelos.

viernes, 1 de abril de 2011

Negocios en Internet - Los Muchos rostros de Dios
Los Muchos rostros de Dios. es el título con que Paulo Coelho identificó un maravilloso cuento que quiero compartir contigo hoy:

“Un novicio estaba en la cocina, lavando las hojas de lechuga para el almuerzo, cuando un viejo monje -conocido por su rigidez excesiva, que obedecía más al deseo de autoridad que a la verdadera búsqueda espiritual- se aproximó.

-¿Puedes repetirme lo que el superior del convento ha dicho hoy en su sermón?
-No consigo acordarme. Sólo se que me gustó mucho. Respondió el novicio.
El monje se quedó estupefacto.

¿Justamente tú, que tanto deseas servir a Dios, eres incapaz de prestar atención a las palabras y consejos de aquellos que conocen mejor el camino? Es por eso que las generaciones actuales están tan corrompidas; ya no respetan las enseñanzas de los superiores.

-Mira bien lo que estoy haciendo -respondió el novicio- Estoy lavando las hojas de lehuga, pero el agua que las deja límpias no queda prisionera de ellas, sino que termina siendo eliminada por la cañería del fregadero. Del mismo modo, las palabras que purifican son capaces de lavar mi alma, pero no siempre permanecen en la memoria. No voy a estar recordando todo lo que me dicen sólo para probar que soy culto y superior a los demás.

Todo aquello que me aligera como la música o las palabras de Dios, termina guardado en un rincón secreto de mi corazón. Y allí permanece para siempre, saliendo a la superfie solamente cuando necesito ayuda, alegría o consuelo”

No hay comentarios:

Publicar un comentario